El simple examen del nombre que encabeza este artículo ,un nombre hermoso y común , aplicado a una flor o a una dama , Rosa , familia de las rosáceas , orden Rosales, nos indica que nos encontramos ante una especie muy particular , que debe ser importante para que su nombre caracterice a grandes grupos sistemáticos.Se trata de una especie que desde siempre atrajo al hombre y que por lo tanto ha servido de punto de referencia para el estudio de las restantes especies de su grupo , el orden de los Rosales.
Conocemos al trigo desde los albores de la civilización , la rosa no le va a la zaga . En unas tumbas descubiertas en los montes Altai con restos del año 4000 antes de Jesucristo , se encontraron monedas de bronce que representaban rosas .Y desde esa fecha los testimonios del cultivo de esta planta son innumerables . La visión cotidiana que puede tener un jilguero de una rosa difiere algo de la nuestra porque para él , el rosal es un arbusto más o menos alto con gruesos tallos entre cuyas espinas puede aferrarse , que tiene hojas de borde dentado y lleva flores de cinco pétalos y numerosísimos estambres . Cuando los pétalos caen marchitos , el fruto todavía está verde aunque no tarda en adquirir un llamativo color escarlata que despierta el apetito de los muchos habitantes del bosque , del seto o de la vereda donde crece el arbusto .Estos son detalles en los que el jilguero , que probablemente no sabe nada de sistemática científica , no se fija. Pero son útiles para el caminante atento que intenta conocer el entorno . Si bien las hojas son parecidas , los tallos similares y las espinas igual de fuertes , las flores difieren enormemente de lo que el hombre de la calle conoce por rosa. Los rosales cultivados , de los que ha habido y hay más de 30.000 variedades , pueden ser trepadores , formar pequeños macizos de medio metro de altura , ideales para cubrir superficies planas , alcanzar tres metros de alto y crecer en forma de seto o encaramarse por la estaca de la maceta en la que se cultiva . Sus flores en lugar de cinco pétalos pueden tener 40 , 50 o 100 , ser grandes o muy pequeñas , desprender un intenso aroma o no oler a nada , pero en cualquier caso siempre hay alguien que busca precisamente esa característica y que , además , está dispuesto a pagar sumas enormes por conseguirlo .Supongamos ahora que al lector le han regalado un pequeño rosal y que estamos en otoño o comienzos de la primavera , que es la mejor época para proceder a su plantación. En primer lugar , convendrá que deje la planta en un recipiente con agua para que así las raíces se humedezcan bien . Mientras deja pasar algunas horas puede ir buscando el emplazamiento para su rosal . Una zona despejada , donde ningún objeto arroje su sombra y el sol se deje ver todo el día sería lo más adecuado . Excavará un hoyo de suficiente profundidad para acoger cómodamente las raíces de la planta . Después , tras sacar el rosal del recipiente con agua , recortará sus raíces hasta unos 25 cm , lo colocará en el hoyo sujetándolo con una mano mientras que con la otra irá echando la tierra suelta , sin apretar ni compactar . Una vez lleno el hoyo , pisará con fuerza para que ahora la planta quede bien sujeta al suelo . Quedará una pequeña hondonada que llenará a continuación con agua a rebosar . Si en la parte aérea hay brotes próximos al suelo , los protegerá con tierra para que el sol o el frío no los dañen . Sólo queda esperar algunos meses y veremos el rosal lozano , cubriéndose con rosas , rosas blancas , rosas amarillas , rosas rojas … hoy por hoy , han manipulado tanto su genética que vi rosas color lila , rosas color violeta , rosas color azul , mis preferidas …. las rojas , ¡ Gracias !
Muchas cosas que uno sabe, gracias !!!!