En su larga historia , los Juegos Olímpicos han demostrado que tienen capacidad de sobreponerse a muchos avatares . Y también que se fueron transformando de acuerdo con el devenir histórico de las concepciones culturales . Sabemos que luego de haber permanecido en el olvido por 1.500 años , resurgieron a fines del siglo XIX de la mano de Pierre de Fredy , barón de Coubertin , y para llegar hasta los albores del tercer milenio debieron superar los grandes cambios que implicaron la transición del siglo XIX al XX , las dos guerras mundiales , la Guerra Fría y algunos boicots .En la actualidad , están lejos de ser la competencia deportiva concebida por Coubertin ,( para quien lo importante no era ganar , sino participar , y entendía al deporte como un vehículo de unión entre los pueblos) , ya que se han transformado en un auténtico espectáculo multitudinario , que mueve miles de millones de dólares .Resulta interesante , detenerse en algunos aspectos que han atravesado las sucesivas ediciones – como el amateurismo o la presencia femenina – y ver cómo , de la mano de los cambios culturales , aquéllos se fueron transformando .Un análisis de los reportes oficiales que genera el Comité Olímpico Internacional en cada edición y los datos aportados por los miles de periodistas que difunden los Juegos hacen posible tomar contacto con estos aspectos , que van más allá de los triunfos y derrotas , y nos permiten ver cómo en el mosaico de personajes , fenómenos y acontecimientos que conforman la historia de los Juegos se cruzaron destinos individuales , procesos históricos , intereses comerciales y desarrollos tecnológicos .
DESDE EL COMIENZO Y CON CAMBIOS
El amateurismo y la presencia femenina son dos ejemplos de los cambios que se sucedieron en los Juegos Olímpicos Modernos . Con respecto al amateurismo , resulta conveniente repasar la idea que se tenía en 1896 sobre esto : el concepto había surgido a mediados del siglo XIX en el Reino Unido con el propósito de impedir que en los encuentros deportivos se enfrentaran deportistas de la clase trabajadora y de la aristocracia . Es decir , de evitar contiendas que involucraran distintas clases sociales . Entre los más adinerados , la práctica deportiva era un simple pasatiempo , por lo que se los consideraba amateurs . En tanto , se entendía que las personas de bajos recursos que se dedicaban plenamente al deporte , desarrollaban una trayectoria profesional . Y eran excluidas de los eventos de la elite . Para Coubertin , esto se contradecía con su ideal humanista y, para solucionarlo , pensó en solicitar a los miembros de la aristocracia que fueran patrocinadores de atletas de la clase trabajadora . Resulta fácil comprender que , ya desde el inicio de los Juegos , no quedó muy claro qué se entendía por amateur . A mediados del siglo pasado , resultó evidente que los propios Juegos requerían que los deportistas contaran con largos períodos de capacitación y entrenamiento , depuración técnica y compromiso de tiempo completo . Uno de los ejemplos más notables fueron los atletas procedentes del bloque comunista , quienes comenzaban a prepararse desde su niñez y por eso tenían un gran desempeño deportivo . Parecía absurdo considerarlos amateurs . Por otra parte , la visión de Coubertin del deporte como vehículo de unión no incluía a las mujeres , ya que se opuso enérgicamente a su participación en los Juegos . Sin embargo , ya en la segunda edición , en 1900 , hubo presencia femenina en ellos y ésta fue creciendo con el correr del siglo . La inquietud fue , entonces , que un hombre se hiciera pasar por mujer para obtener ventaja en las competencias . En México 1968 , se incorporaron lo que se llama «pruebas de género» , que al principio consistían en revisaciones físicas a las competidoras y , posteriormente , en pruebas de laboratorio . Algunos especialistas aseguraron que éstas no eran del todo confiables , ya que algunas atletas , aunque en verdad eran mujeres , padecían extrañas anomalías genéticas . En 1999, fueron eliminadas oficialmente . Los nuevos reglamentos olímpicos permiten la participación de transexuales , aunque imponen como requisito el reconocimiento oficial del nuevo sexo y que el deportista se haya sometido previamente a dos años de terapia hormonal . Uno de los grandes desafíos para el futuro del olimpismo es la celebración de eventos mixtos que incorporen a deportistas de ambos sexos que compitan entre sí .