En 1958 el multifacético artista uruguayo Carlos Páez Vilaró eligió los acantilados rocosos de Punta Ballena para levantar su taller .Luego de construir una precaria casilla de lata , en donde acumuló puertas , ventanas y materiales , levantó «La Pionera» , construcción que fabricó con maderas arrojadas por el mar los días de tormenta . En 1960 comenzó a cubrir las paredes con cemento sumando habitaciones , «dibujando» y esculpiendo recovecos . Modeló las paredes con sus manos utilizando guantes que creó con restos de cubiertas .Así surgió Casapueblo , museo , casa y taller del artista. Las paredes parecen nacidas de las olas y las cúpulas se funden con las nubes en perfecto diálogo con la naturaleza , el museo-taller definido por Vilaró como una «escultura habitable » es obra , paisaje y proclama al mismo tiempo .
Sin ser arquitecto logró una armoniosa integración con la anatomía del lugar . «Pido perdón a la arquitectura por mi libertad de hornero «, dice el artista justificando la osadía de su creación . Desde Casapueblo Vilaró le rinde todos los días tributo al sol : minutos antes que desaparezca se escucha la voz grabada del artista dedicándole un poema y luego la gente reunida frente a la bahía de Portezuelo cierra el ritual con un aplauso .(2006 ) . El arte de Carlos Páez Vilaró forma parte de la identidad estética nacional .Si bien adquirió renombre internacional a través de sus pinturas y murales , su producción atraviesa las más variadas disciplinas de la creación artística . Viajero empedernido , convirtió la aventura en una forma de vida y fuente de inspiración . Visitó Nueva Guinea , Machu Pichu , Brasil , África , las islas de Oceanía y en cada uno de sus viajes el color de su mano de artista supo posarse sobre escudos , paredes , embarcaciones , y hasta en pareos y chozas . Durante sus viajes pintó para vivir y las obras sirvieron para pagar hoteles , comida y realizar trueques por objetos como las hermosas máscaras y piezas de arte africanas que hoy atesora en su colección particular . Vivió con el doctor Albert Schweitzer en el leprosario de Lambarené en África , experiencia que remarca en el video biográfico que se proyecta a los visitantes a modo de presentación en Casapueblo. Al son de los Viajes , Carlos Páez Vilaró nació en Montevideo el 1º de noviembre de 1923 . Admirador de la obra de Pedro Figari se inició , en la década del 40 , pintando temas folclóricos ; pericones , caballadas y yerras fueron protagonistas de esas primeras creaciones hasta que el interés por la vida del negro uruguayo acaparó la mayor parte de su producción . En «Yacumenza» , una de las piezas del mítico conventillo Mediomundo -hoy demolido – , Vilaró pintó decenas de cartones con escenas de lavanderas , candombes , velorios y carnaval . Su pasión por la cultura afro-uruguaya no tiene límites . En sus viajes tuvo la oportunidad de conocer a artistas como De Chirico , Andy Warhol, Alexander Calder y Salvador Dalí, entre otros ; pero de todos estos nombres uno lo marcaría «a fuego» : Pablo Picasso .Lo visitó en el año 1957 en la villa «La California » en Cannes , Francia . El encuentro fue más que estimulante : afirmó su vocación por la cerámica , labor que ya había comenzado en el año 1952 y que desembocaría en un impulso voraz por las artes de fuego . En 1972 Vilaró realizó una exposición de platos en Casapueblo . Escribía en el catálogo : «Voy a servir la mesa con todos mis platos. Una mesa larga como el camino del sol . El que recorro con mis ojos cada tarde cuando el día se cierra sobre este escenario abierto sobre el mar de mi taller . Voy a tender la mesa , con todos mis platos . Mi mesa con manteles de cardumen . Y pondré una tarjeta para cada invitado , porque esta comida será algo especial , porque aspiro a reunir a mi lado por encima de edades y razas , profesiones e ideas , a seres que he tocado , contactado , abrazado en mis largas travesías , mis largos itinerarios marcados de sol a luna , de almuerzo a cena …..» . También gracias al encuentro en «La California» el público uruguayo pudo disfrutar en 1959 de una colección de veintisiete cerámicas que Picasso le comisionara para exhibir en Montevideo .
CASA , MUSEO Y TALLER
Casapueblo es para muchos su obra cumbre . Comenzó a construirla en 1960 y la hizo crecer sumándole habitaciones hasta convertirla en la monumental «escultura habitable» de aspecto mediterráneo que desafía al viento y el mar desde las rocas de Punta Ballena Allí vive junto a su familia y recibe a los visitantes , quienes pueden recorrer las salas acondicionadas como museo en las que se exhiben las obras de sus diferentes períodos Desde hace algunos años funcionan además un apart-hotel y un restaurante construidos en sintonía con la arquitectura artística inicial . Las salas del museo así como los pasajes y pasillos llevan nombres de personajes a modo de tributo . En las salas Rafael Squirru, José Gómez Sicre, Pablo Picasso y Nicolás Guillén se exhibe gran parte de su producción , desde sus primeros dibujos sobre el candombe realizados en la década del 50 hasta la más reciente , como las cerámicas horneadas en Marruecos en 2000 . El museo también cuenta con una sala dedicada a la pintura de su hija , Agó . La obra de Páez Vilaró es arte y parte de la cultura uruguaya . Ha inmortalizado escenas de folclore popular en murales de grandes dimensiones en lugares como el Mercado del Puerto , el Aeropuerto de Carrasco y el Conrad Resort Casino de Punta del Este, en el cual decoró el fondo de la piscina , y en un mural interior en el que describe la historia de Maldonado . El correo ha editado sellos con su obra ; se pintaron aviones de Pluna con sus dibujos ; libros como Arte y Parte (2000) y Entre colores y Tambores (2000) que incluye Afrikandombe, un cd grabado con sus composiciones , cuentan su vida y recogen gran parte de su producción artística que a la fecha se estima en más de 4.000 obras pintadas e innumerables cerámicas , platos , dibujos , acuarelas y esculturas .
Fuente : 100 objetos 100 historias
Por Alejandro Sequeira