Howard Carter es y será hoy el nombre más famoso del mundo. El egiptólogo y arqueólogo ingles llega hoy a la portada de Google con un doodle espectacular en el que se puede ver a nuestro protagonista ante el hallazgo que le hizo mundialmente famoso y eternamente recordado: la tumba de Tutankamon y los tesoros que alrededor de ella encontró. El buscador más famoso del mundo ha querido celebrar así el 138º aniversario de su nacimiento con una obra que rinde tributo a su transcendental descubrimiento..Google culmina con el de Howard Carter una serie continúa de doodles que tuvo en el graffiti artístico de Keith Haring el pasado viernes su última entrega. Antes nos había deleitado con el únicamente español de Ramón y Cajal. También recordamos todavía el impactante de la cremallera que abría Google, en tributo del inventor sueco Gideon Sundback. Pero antes nos deleitó con un buen puñado de originales diseños: El ,del Día de la Tierra fue el último de ellos el pasado domingo. Así, por ejemplo, hace diez días, el buscador nos sorprendía con un homenaje a Robert Doisneau. Previamente, habían rendido pleitesía a Eadweard J. Muybridge. Justo antes de Semana Santa, nos deleitaban con un serial de ellos, a cual más original: desde el plenamente español de la Constitución de la Pepa, tan festejado en nuestro país hasta el mundialmente reconocido de la celebración de la Primavera, con colorido y pasión incluidas. Más tarde Google nos presentó el del universal pintor español Juan Gris. Después asistimos a uno racional en honor del arquitecto alemán Mies van der Rohe. Y hoy, así ve Youtube el doodle de Howard Carter.
Gracias Howard Carter , Gracias Google !!
Howard Carter pudo presumir en su momento de ser uno de los hombres más afortunados del mundo y Google se encarga de recordar hoy su memoria, en tanto que si pulsamos sobre su emblema tendremos la oportundad de conocer su apasionante e inesperada biografía de este arqueólogo excepcional, nacido un día como hoy, 9 de mayo, 1874. Hjo de un pintor, y dotado de un excepcional talento para desempeñar el mismo oficio que su padre, Google nos quiere recordar hoy todos los datos de interés sobre Howard Carter, una figura apasionante y digna de estudio. Así que no pierdan ocasión de apuntar todo lo que le vamos a contar en estas líneas y hallarán en este inglés un personaje digno de estudio. Cojan lápiz y papel o simplemente reténganlo en la memoria. Allá vamos.
Nacido en Norfolk, Inglaterra, Howard Carter fue el menor de una numerosísima familia de once hermanos y como tal apenas recibió una educación formal más que la que su padre, artista como hemos mencionado, tenía a bien inculcarle en su propia casa. Fue precisamente esta figura paternal quien le hizo crecer en su interior la pasión por los fundamentos y posibilidades del dibujo y la pintura, que se encargó de administrar con todo su talento. Pero a Howard Carter el destino le tenía reservado empresas de mayor calado.
A la todavía tierna edad de 17 años, Howard Carter recibe una oferta de una compañía egiptóloga de Inglaterra para embarcarse hasta el país africano y aprovechar su calidad como dibujante para desempeñar diversasa tareas: a saber, la copia bajorrelieves y aspectos de excavación, hasta el punto de llegar a restaurar los monumentos con los que trabajaba. Acabó convirtiéndose en Inspector de Antigüedades. Ahí es nada. Ya se pueden hacer una idea de lo que valía Howard Carter. Y Google nos lo recuerde así hoy.
Howard Carter y su carrera se conviertieron de la noche a la mañana, con esfuerzo y dedicación, en imparables.1908 es un año clave en su vida en tanto que se produce un encuentro con una persona que marcará de destino. Lord Carnarvon un noble inglés que mostraba un desmesurado interés por todo lo relacionado con Egipto se muestra interesado en prolongar el trabajo realizado hasta la fecha por Howard Carter, por lo que decide contratarle. Aprovechando su condición adinerada, Carnavaron aporta todos los fondos necesarios para posibilitar que todas las tareas lleguen a buen puerto. Las excavaciones tendrían lugar primero en Tebas y luego en el valle de los Reyes, por lo que Howard Carter no puede disimular su encanto ante el futuro que se le venía encima. Si 1908 fue un año importante, 1922 supuso tocar el cielo ya que, tal y como nos recuerda hoy Google, fue en ese noviembre cuando la tumba de Tutankamon apareció ante sus ojos y, por consiguiente, a los de medio mundo que recibió entusiasmado la noticia. En esta grabación que le ofrecemos a continuación podemos conocer las primeras impresiones de Howard Carter tras el descomunal hallazgo:
Beni Hasan y más tarde William Flinders Petrie participaron en la excavación junto a Howard Carter el último de ellos ejerciendo la tutela sobre la misma. Gracias a la financiación de Lord Carnavaron, el 4 de noviembre , nuestro protagonista designó con el nombre KV62 a la cámara funeraria, intacta todo hay que decirlo, de hasta entonces un desconocido faraón como era Tutankamon. Y tal y como nos informa Google, el 16 de febrero Howard Carter, junto con el propio Carnavaron, procedió a la apertura del sarcófago del joven egipcio, siendo el primer hombre que divisaba su cuerpo momificado. Un placer reservado solo a los elegidos.
Howard Carter, embriagado de optimismo, quizás demasiado, anunció en 1931 que su siguiente objetivo sería el de localizar la tumba del gran Alejandro Magno, para lo que informó que se adentraría en Asia Menor pero sus iniciales propósitos cayeron en saco roto. Sin embargo, Google nos quiere decir que este ‘pequeño fracaso’ no supuso una pérdida de reconocimiento, sino todo lo contrartio. Y es que Howard Carter, en virtud de sus hallazgos, de categoría suprema para toda la Humanidad, fue distinguido con el doctorado honoris causa en Ciencias por la Universidad de Yale y además como miembro de honor de la Real Academia de la Historia.
Pero a Howard Carter ya se la habían acabado sus días de gloria, que por cierto no fueron pocos. Catalogó más descubrimientos y encauzó su vida como asesor de coleccionistas y diversos museos, como fueron los casos de los de Cleveland o Detroit. En 1939, a los 65 años, Howard Carter dejó el mundo pero alimentó con su muerte la denomidad ‘leyenda de los faraones’ que habla de una nefasta suerte para todo aquel que se adentró en el homenaje funerario de Tutankamon. Google nos informa que fue enterrado en el cementerio de Putney Vale, al oeste de Londres, donde su tumba es a día de hoy un homenaje a Egipto y sus riquezas .Sobre ella se pueden leer dos frases que resumen a la perfección su pasión por el país que le dio la gloria. «Tú que amas Tebas, que tu espíritu viva, que puedas pasar millones de años, sentado con tu rostro hacia el viento del Norte, y los ojos resplandecientes de felicidad», es una. «Oh, Noche, extiende sobre mí tus alas, como las estrellas imperecederas», la otra. Jaromir Malek, egiptólogo checo, resume como nadie el espíritu y el tesón de nuestro protagonista. «Todos hubiéramos tirado la toalla ante las dificultades que Howard Carter afrontó. Si hubiera sido un tipo fácil no hubiera descubierto la tumba de Tutankamón». Démosle, pues, las gracias.
Fuente:
http://www.ideal.es/granada/ocio/howard-carter-tumba-tutankamon-resucitan-google-201205090835.html