Hasta no hace mucho tiempo , había una tendencia a considerar la educación sexual , de los niños como la información que debía brindarse en relación con la unión genital de una pareja adulta , sin tomar demasiado en consideración la capacidad de dar y recibir amor. Así se dejaba de lado un aspecto importantísimo de la sexualidad humana . Algunos padres no estaban de acuerdo con tal objetivo y otros no se sentían capaces de brindar este tipo de información , muchas veces por temor o vergüenza. El resultado fue, en la gran mayoría de los casos , que los niños obtuvieran en su hogar respuestas titubeantes , falsas o nulas acerca de los temas relacionados con la sexualidad . Todos los niños preguntan , de algún modo , durante su evolución : ¿ cómo nací ?. Lo mejor es que la respuesta la den los padres . Cualquiera sea su nivel de educación formal , ambos padres están en condiciones de responder a la curiosidad sexual de los hijos , poniéndose de acuerdo en forma previa acerca de la información que es conveniente darles .Esta curiosidad se hace notoria en los niños alrededor de los dos años , según las características de cada uno , la madurez alcanzada y los estímulos que recibe . Existen situaciones que actúan en forma típica como desencadenantes de los interrogantes del niño . Puede tratarse de un nuevo embarazo de la madre , un nacimiento en la familia o el vecindario, o las escenas de un programa de televisión. Cuando estos temas han sido acordados en forma previa por la pareja , es más probable que exista coherencia en el mensaje que los adultos transmiten al niño , al igual que una buena disposición para conversar acerca de todos los temas planteados por el hijo . Si la curiosidad sobre los temas relacionados con el sexo no es tenida en cuenta por los padres , se corren al menos dos riesgos . En primer lugar , la información , obtenida a través de pares en la mayor parte de los casos , puede estar distorsionada o ser errónea
En segundo lugar – pero aun más importante – puede dañarse la confianza de este niño es sus progenitores . El descubrimiento de los propios órganos genitales , marca un hito en el despertar de la curiosidad sexual .Como en todos los temas , es conveniente llamar a las cosas por su nombre . El niño tiene «pene» y «testículos» , mientras que la niña tiene «vulva» y «vagina». Cuando las palabras que son utilizadas habitualmente en el medio social para referirse a los genitales , despiertan dudas , la consulta a los padres es una buena forma de despejarlas . En éstos y en otros interrogantes decir la verdad de un modo sencillo suele ser la mejor opción. Luego los niños tratarán de averiguar de dónde vienen los bebés . Es el momento de contarles con sencillez cómo y dónde crecieron en la panza de mamá . A muchos niños pequeños les resulta atractivo exhibir sus genitales a otros niños . Otros se permiten la exploración visual , y a veces manual , de los cuerpos de otros niños, mediante juegos como «la mamá y el papá » , o » el consultorio del doctor «.Son modos de satisfacer sus propias curiosidades . También se preguntan por las diferencias sexuales de los padres y tratarán de observarlos en el baño o cuando se estén vistiendo . Sin alentarlos ,es útil que los progenitores no muestren enojo o vergüenza . A algunos varoncitos de tres o cuatro años , les gusta jugar con las muñecas , participar en rondas o jugar a la mamá y al papá. Otras niñas patearán la pelota mejor que muchos compañeritos . Como consecuencia , ciertos padres se preocuparán por estas conductas que tienen que ver con determinados roles de género no esperados , y se preguntarán por la identidad sexual de sus niños . Lo que habitualmente se observa es que las diferencias de conducta entre varones y mujeres comienzan a hacerse más marcadas a partir de los cinco años . El fenómeno de identidad sexual , de sentirse a sí mismo como similar al padre del mismo sexo , es progresivo y se encuentra incorporado por completo cuando cuando el niño comienza la escolaridad primaria . Ya fue señalada la etapa en la cuál los niños desean casarse con el padre del sexo opuesto. Verbalizan sus intenciones y no suelen tolerar bien las demostraciones de afecto entre los padres. Con el tiempo van superando este período de intensos y contradictorios sentimientos . La pregunta temida por muchos padres llega alrededor de los cinco años : ¿ cómo entran los bebés en la panza de la madre ?. Es necesario tener en cuenta que lo que no se responda en ese momento ,pocas veces se vuelve a preguntar . Nuevamente , el cariño , la verdad y la sencillez son lo más importante para guiar la conversación entre padres e hijos . Gracias !!.