Hace 2400 años , Aristóteles postuló que los sueños pueden darnos información sobre nuestra salud . En el siglo 2 de nuestra era , Galeno escribió sobre su valor para el diagnóstico de las enfermedades . En nuestros días , investigaciones como las de Robert C. Smith , de la Universidad del Estado de Michigan , tienden a confirmar esto .La conclusión a la que parecen estar llegando las investigaciones es que existen problemas y disturbios de tipo orgánico que nuestra conciencia no puede captar mientras estamos despiertos , pero que son recogidos y representados en nuestros sueños . Algunos nos advierten específicamente sobre una parte de nuestro cuerpo o sobre una condición particular , mientras que otros se relacionan más bien con la condición general de nuestra salud y con nuestro balance interno . Prestar atención a nuestros sueños , por lo tanto , no es un ejercicio banal . Puede ser , incluso , una conducta preventiva .