El Mar Muerto es un lago salado situado en una profunda depresión, a 435 metros bajo el nivel del mar, entre Israel y Jordania.
Una de las razones por las que el Mar Muerto es tan salado se debe a que está ubicado en una cuenca hidrográfica endorreica, es decir, no hay salidas.
Los minerales que llegan de otros ríos a él se quedan allí para siempre.